El número de mudanzas en nuestro país aumenta cuando se acerca el verano y el buen tiempo. <<Me lo dirán a mi que me he cambiado de casa 5 veces y todas ellas han sido en esta época. Siempre las recuerdo tirándome de cabeza luego en la playa o la piscina. Qué suerte tener cerca el mar… 🙂 >> En esta época hay más tiempo para hacer la mudanza tranquilamente, recibir ayuda por parte de amigos y familiares, tener más horas de luz…, pero no todo son ventajas. Así que hoy vengo a contaros los pros y los contras para que, si os habéis decidido a cambiaros de casa en verano, podáis prever mucho mejor todas las situaciones. ¡Atentos!

Ventajas de hacer la mudanza en verano

  1. No hace frío y hay más horas de luz… El clima de verano es el ideal para organizar una mudanza.
  2. Disponemos de mayor tiempo (al estar de vacaciones) por lo que organizarla y planificarla será mucho más fácil.
  3. Estamos más relajados y tranquilos por lo que nuestro nivel de estrés será menor.
  4. Podemos contar, con los más pequeños de la casa e implicarles en el proceso… Contar con ellos en una mudanza es una gran oportunidad para enseñarles valores educativos, organización y dar prioridad a las cosas mas importantes.
  5. Al estar de vacaciones, nos podemos permitir pasearnos por el nuevo barrio, conocer a los vecinos y los servicios que se ofrecen.
  6. Si la casa es nueva y no está dada de alta la luz, como hace calor, no hará falta que funcione el calentador y podréis pegaros una ducha con agua fría.

Si además el cambio es hacia una zona donde suele llover ahora es el momento propicio para hacer el cambio y aprovechar el buen tiempo.

Ahora veamos los inconvenientes…

  1. Si queréis contar con una empresas de mudanzas debéis tener en cuenta que, están más solicitadas en esta época, precisamente por todo lo comentado anteriormente. Así que no tendréis muchas fechas donde elegir.
  2. Hay que informarse bien de sus servicios, pedir presupuesto con tiempo suficiente y establecer una fecha concreta para la mudanza si no puede haber sorpresas indeseadas.
  3. En las zonas calurosas de España, realizar una mudanza en pleno julio o agosto puede ser muy duro, un trabajo realmente agotador. Tendremos que mantener una hidratación continua para evitar incidentes desagradables y no realizar la mudanza en las horas centrales del día, donde la temperatura es mayor (evitar salir a la calle desde las 12 hasta las 5 de la tarde) sobre todo si estamos con niños, ancianos, enfermos, embarazadas y mascotas, ya que son los más vulnerables a las altas temperaturas y a los cambios bruscos frío-calor.
  4. Si necesitáis comprar cosas de última hora encontraréis establecimientos de vacaciones… ¡Así que sed previsores!
  5. Si no tenéis dada de alta la luz no podréis poner en marcha el aire acondicionado…

El mejor plan de mudanza: levantarse temprano, beber mucha agua, parar a la 1 del medio día, tomarse una cervecita, echarse una buena siesta y, cuando cae la tarde y el sol deja de arder… Volver a retomar las tareas más duras.

Lo mejor en cualquier caso será contar con una empresa de mudanzas profesional que nos asesoren en todo lo necesario. Hay detalles que no solemos tenerlos en cuenta y, sin embargo, saber cómo actuar en todo momento puede liberarnos de más de un dolor de cabeza.

Y vosotr@s, ¿qué ventajas o inconvenientes encontráis a realizar una mudanza en verano? ¿Qué consejos nos daríais para hacerla más llevadera? ¡Contadnos!

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