Los cumpleaños de los niños muy pequeños son acontecimientos para toda la familia, sobre todo cuando se trata del primer nieto. Más que una fiesta de niños, cuando el peque es todavía un bebé es una comida familiar a la que acuden tíos, abuelos y demás familiares cercanos. Ante un cumpleaños así, una de las mejores soluciones es encargar comida preparada a domicilio. Te contamos sus ventajas.

Te olvidarás del estrés de cocinar

Cocinar para muchas personas cuando no estás acostumbrado, es un verdadero estrés. Y es que no se trata solo de preparar los platos, sino de todo el proceso previo: decidir qué se va a cocinar, buscar la receta, elaborar la lista de ingredientes, ir a la compra…

Lo que tendría que ser una fiesta divertida y familiar se acaba convirtiendo en un trabajo y en una fuente de estrés que hace que no resulte apetecible en absoluto. ¿No sería mucho más agradable sentarse en la sala con el ordenador o la tablet y escoger los platos cómodamente?

Podrás invitar a personas con dietas concretas

En este tipo de eventos siempre hay problemas. Un invitado que no puede tomar lactosa, un intolerante al gluten o un vegano. ¿Sabes cómo cocinar para cada uno de ellos? Seguramente no, pero sí puedes comprar un plato que puedan tomar sin problemas.

Si tienes dudas sobre los ingredientes y alérgenos que pueda contener un plato, solo tienes que llamar y te informarán, ya que es obligatorio que sepan exactamente qué alérgenos contiene cada receta. Así, estarás tranquilo y también lo estarán tus invitados que comerán estupendamente y sin complicarte la vida.

Dispondrás de un presupuesto cerrado

Cuando encargas platos preparados no hay sorpresas para el presupuesto, solo tienes que entrar en la Web, elegir qué platos vas a servir y el número de raciones de cada uno. Lo que marca la cesta de la compra en el momento en que le das a pagar es lo que te vas a gastar.

Cuando preparas la comida en casa, entre lo que calculas que puede costar la elaboración de un plato y lo que finalmente vale puede haber diferencias significativas, sobre todo si no estás acostumbrado a hacer la compra para tantos o si los productos que quieres adquirir sufren variaciones en el precio, como es el caso de algunos pescados. Con los platos preparados no hay sorpresas y sobresaltos.

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